En el programa de esta 8ª etapa del Giro de Italia, la primera del alta montaña, 179 kilómetros y tres ascensiones, todas situadas en los últimos cincuenta kilómetros. Un inicio de la misma relativamente llana, los corredores iniciaban el duro puerto del Cippo di Carpegna, para afrontar 17 kilómetros de un descenso muy técnico. Después, la carrera de elevaría de nuevo. El Montecopiolo era el juez de paz de esta etapa. En su perfil, una pendiente irregular con una primera parte de 9 kilómetros al 5% de media, luego un corto descenso, para luego afrontar los últimos 6 kilómetros al 6% con una pendiente máxima del 13%, a solamente 100 metros de la llegada. Una primera etapa que sobre el papel daría un gran vuelco en la general.
La salida se producía a las 12:30, y se formaba rápidamente la fuga que iba a ser a la postre, los que conformarían los verdaderos héroes de la jornada, estaban Marco Bandiera (Androni), Stefano Pirazzi (Bardiani-CSF), Carlos Quintero (Colombia), Julien Berard (Ag2r-La Mondiale), Mattia Cattaneo (Lampre-Merida), Mauro Finetto (Vini Fantini), Eduard Vorganov (Katusha), Perrig Quemeneur (Europcar), Edvald Boasson Hagen (Team Sky) y Julian Arredondo (Trek Factory Racing). Los escapados obtendrían la máxima ventaja de siete minutos a mitad de la carrera.
Todos iban cayendo como fruta madura, excepto el Colombiano Julian Arredondo, que se mantendría en solitario a tan solo dos kilómetros de la meta situada en el Montecopiolo, al ser alcanzado por el Francés del equipo Europcar Pierre Roland, siendo absorbido por parte del grupo de favoritos a falta de tan solo 100 metros, siendo el Italiano Diego Ulissi el vencedor de la misma.
La general queda encabezada ahora por el Australiano Cadel Evans del equipo BMC.
17/05/2014